Miles de españoles participan en la ‘marcha por la dignidad’

MADRID.- Miles de personas procedentes de todo el país se manifestaron por las calles del centro de Madrid en las llamadas “marchas de la dignidad”, en las que reclamaron a las autoridades españolas “pan, trabajo, techo e igualdad”.

A lo largo de todo el recorrido se escucharon gritos contra la corrupción política, que en los últimos años ha estado plagada de escándalos relacionados con todos los partidos políticos, pero sobre todo con el derechista Partido Popular (PP).

La manifestación recorrió el centro de la ciudad, pero desde los cuatro puntos cardinales en los que salieron las cuatro columnas de la marcha. La “columna de la libertad” entró a Madrid por la zona sur y en ella confluyeron los colectivos sociales y ciudadanos que viajaron desde Andalucía y Castilla La Mancha.

La “columna solidaridad” entró por la zona norte y en la que se encontraron los ciudadanos que venían del País Vasco, Galicia, Asturias, Castilla y León y Cantabria. La “columna unidad”, que circuló por la zona oeste, concentró a personas procedentes de Extremadura y Castilla La Mancha.

Y, finalmente, la “columna igualdad”, que entró por la zona este y concentró a colectivos sociales de Cataluña, Valencia, Murcia y Aragón. En todas ellas se escucharon tambores, silbidos, caceroladas y gritos contra el gobierno de Mariano Rajoy y contra el trabajo precario.

“Hace falta ya una huelga general” y “PSOE, PP, la misma mierda es” fueron las dos consignas que se escucharon con más insistencia a lo largo de toda la protesta, en la que además se exigió a los partidos políticos y al gobierno que se cumplan con los cuatro derechos constitucionales que desde que irrumpió la crisis económica se han ido debilitando en el país: pan, trabajo, techo e igualdad.

La protesta finalizó en la céntrica plaza de Neptuno, que está a unos metros del Congreso de los Diputados y ahí oradores advirtieron: “Nos encontramos ante una situación extremadamente difícil, una situación límite, de emergencia social, que nos convoca a dar una respuesta colectiva y masiva de la clase trabajadora, la ciudadanía y los pueblos”.

Agregaron: que hay “millones de trabajadores ... sin empleo cuando tener unas manos para trabajar; tener una carrera terminada; disponer de tu capacidad tanto manual como intelectual y no encontrar un trabajo digno es humillante. Se está desperdiciando el talento colectivo de una sociedad, hipotecando indefinidamente su futuro”.

Asimismo se recordó que cientos de miles de familias han perdido su casa a manos de entidades financieras. “No hay nada más inhumano que desalojar a una familia de su hogar, sólo para alimentar la voracidad insaciable de unos banqueros sin escrúpulos.

Banqueros a los que los estados siervos de la Troika alimentan a costa de empobrecer aún más a la clase trabajadora y a las personas más indefensas”.

Durante la concentración también se advirtió de los estragos que hace al Estado del bienestar el fenómeno de la corrupción político-empresarial, al advertir que los “distintos gobiernos se sitúan fuera de la legalidad, convierten en negocio los derechos que tanto costaron conquistar y sustentan la corrupción, un hecho generalizado pero no independiente del sistema económico, que forma parte de la estructura misma de esta sociedad y es indispensable para su desarrollo.

Tanto los corruptores como los que se dejan corromper forman parte de este sistema injusto de producción y distribución de la riqueza”.

La manifestación se produjo una semana después de que la formación emergente Unidos Podemos congregó a unas 10 mil personas en la Puerta del Sol de Madrid para impulsar una moción de censura al gobierno de Rajoy por los casos de corrupción en el seno de su partido.

Por lo que insistieron en que es urgente “una movilización contra el pago de la deuda, por el empleo digno, por la renta básica, por los derechos sociales, por las libertades democráticas, contra los recortes, la represión y la corrupción, por una sociedad de hombres y mujeres libres, una movilización contra un sistema, un régimen y unos gobiernos que nos agreden y no nos representan”.